“Dicen: Si alguno dejare a su mujer, y yéndose ésta de él se juntare a otro hombre, ¿volverá a ella más? ¿No será tal tierra del todo amancillada? Tú, pues, has fornicado con muchos amigos; mas ¡vuélvete a mí! dice Jehová. Alza tus ojos a las alturas, y ve en qué lugar no te hayas prostituido. Junto a los caminos te sentabas para ellos como árabe en el desierto, y con tus fornicaciones y con tu maldad has contaminado la tierra. Por esta causa las aguas han sido detenidas, y faltó la lluvia tardía; y has tenido frente de ramera, y no quisiste tener vergüenza.” Jeremías 3:1-3 RVR1960. (Lee Jeremías 3.4 al 25, antes de escuchar el audio de 21.19 minutos).
Escuchar los comentarios acerca de Jeremías tres, por el Dr J. Vernon McGee. http://obrerofiel.s3.amazonaws.com/wp-content/uploads//2010/10/Jer-3-McGee.mp3
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