Definitivamente, la base sólida, absoluta e indispensable de la justicia en todo sentido es la verdad. Por tanto, cuando hablamos de justicia, en cualquiera de sus aplicaciones, en todos los niveles, y se actúa con mentiras, engaños, hipocresía y falacias no puede haber justicia, porque la base de la justicia es la verdad. Investiga cuidadosamente Efesios 6.10-20, con en énfasis en el verso 14.
Reflexión 32
Mayo 30 de 2018