Sabemos que el justo ha sido justificado por fe y para fe; es decir, para ser salvo por la fe y para vivir también por la fe, Romanos 1.17.
Justificados por la fe. El Espíritu Santo enseña por medio de Pablo que nuestra justificación para con Dios es por su justicia y su gracia, sólo por la fe en Cristo, según Romanos 3.21-31.
También ofrece ejemplos de esa justificación por la fe en Cristo, como vemos en Romanos 4.1-25 y 5.1-11.
Para fe, es decir, para vivir también por la fe. Esto de vivir por fe se aplica a todo lo nuevo que tenemos en Cristo, incluyendo las buenas obras como evidencia de nuestra fe en Él, de conformidad con Efesios 2.8-10.
Por tanto, el Espíritu Santo a través de Santiago, amplía y explica lo que esto significa, porque la fe sin obras es muerta y no da testimonio de nuestra salvación, según Santiago 2.1-26.
Es nuestro mayor deseo que dediques todo el tiempo necesario para estudiar las citas bíblicas incluidas en esta nota pastoral, que es para nuestro crecimiento espiritual integral.
Nota Pastoral 046
